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Monteyro con otros quatro PP.Padres de la Compañia que iban a la corte de los quales dos iban por Mathema-
ticos, uno que era lego, por boticario, y uno a tomar diploma. Luego que dho R. P. F.dicho Reverendo Padre Fray
Thomas Hortiz lo supò baxò al barco a vizitarles con esta ocazion.+ {+les pudò decir todo lo obrado por los Mandarines, y suplicarles intercediera con ellos por la iglesia} ofreciolo hazer dho
R. P. Monteyro, que iba como superior de los demas, pero era tanto lo que se quexaba
del poco aprecio, que ellos hacian los Mandarines, que dexaban poca esperanza de
conseguir lo que se pretendía; para exemplar de lo que decia referia entre otras
cosas, que el Pùchingeū, que es un Mandarin grande de la Prova.Provincia de Canton, y havia ve-
nido en compañia suia, no havia querido dexarse ver de los PP. sino sola una voz
y essa con mucha dificultad. Bolbiò otro dia el R. P. Hortiz al barco a saber el esta-
do de su pretenzion. Respondiòle dho R. P. Monteyro, que havian embiado
un mozo con papeles de vizita suyos, para pedirle por la Yglesia, y que havia Res-
pondido dho Mandarin, que este no era negocio suyo sino del Mandn.Mandarin de la Ciudad,
despues un China dixò a dho R. P. Hortiz, que dho R. P. Monteyro, y los demas ha-
vian concurrido con el Mandn. de la Ciudad en cierta casa, o lugar antes de la
Audienzia del Chungto (que es el primer Mandn. de toda aquella Prova. y de la de
Kuangsy) a quien yban unos, y otros a vizitar, y que dho R P. le havia querido
hablar alli por dos, o tres vezes al Mandn. de la Ciud.Ciudad, mas que este siempre
se havia dado por desentendido, dando a entender, que no entendia lo que decia =
N 28 La vispera que havian de partir dhos RR PP.Reverendos Padres embio el Mandn. al barco pa-
peles de vizita combidandoles a un refresco, y a la Yglesia combidando a dho
R. P. F. Thomas Hortiz para que fuesse con ellos: dho R. P. valiendose de esta oca-
cion tan oportuna suplico mucho a dhos RR PP. para que pidiessen por la Ygle-
sia, ofrecieronlo hazer. Fueron todos al banquete, que se conluyò sin tomar en boca dha Yglesia.
despues estuvieron en conversazion, y entretenidos en otras cosas algun tiempo, y tampoco se hablò so-
bre la Yglesia; despues se despidieron, y en el camino para la puerta, dho R P. Monteyro
pidio por la Yglesia. El Mandn. respondiò diciendo no importa, no importa, todo se reduzga
a uno. dho Pe. Monteyro enmudecio con esta respuesta, o ya porque no entendia la alma de ella, o,
ya porque con ella quedò cortado, o ya por alguna otra causa. el R P Hortiz que iba de-
lante, no pudò percebir lo que havia dho el Mandn. mas viendo aquella disposizion,
le pareciò que havia concedido la peticion, especialmente por haver medio entendido
aquellas palabras, no importa, que en China, son de consuelo en semexantes ocazio-
nes; y por esso bolbiò, y dixò al Mandn. que lo agradecia. Salieron de la Audienzia
y luego dho Rdo P.Reverendo Padre Hortiz preguntò a los Chinas, que palabras eran las que ha-
via dho el Mandarin; Refirieron las sobre dhas, y por eso conociò el mal estado
de su pretenzn.pretensión; porque con ellas havia querido dezir, que no importaba se de-
rribasse la Yglesia; porque todos los Christianos podian venir a la Yglesia de Xaò
Kingfù. Juzgò dho R P Hortiz, que dhos RR PP. havian padecido algunos desay-
res en lo arriba dho; y assi fue nesesso.necesario sobre no haver conseguido cosa alguna
darles muchas grazias por todo. =
N. 29 Partieron dhos RR PP. para la Corte, menos el R P. Monteyro que bolbiò a Canton
a donde el Empor.Emperador le tenia señalado junto con otros quatro su havitazion, y luego
los Mandarines comenzaron a hazer las diligenzias nesesarias para poner en exe-
cucion la sentencia dada contra la Yglesia dho R. Pe. F. Thomas Hortiz, no hallan-
do otro medio alguno en lo Humano, quiso con plata detener la fuerza de esta