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Cecilia at Sep 01, 2023 08:51 PM

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primera instancia, uno fue el sobredhosobredicho Apostata; Pasaron a reconoser la causa, y
hallaron que no era negocio de que se podia temer; y para quitar, o consolar a
los vezinos de algunas Aldeas, que estaban algo atterorizadas, y con algun so-
bre salto con la noticia de este levantamineto, que assi le llamaban agunos, man-
daron hazer comedias (como acostumbran los Chinas en semexantes ocaziones)
con una aldea no lexos de la de Jungcheū, y para que la funzion tubiesse mexor ef-
fecto, baxò el mismo Mandarin de la Ciudad de Xaò Kingfu, estando alli
viendo la comedia, y bebiendo vino, llegò uno, que se discurre fue el Acudador
el qual andaba muy metido en este negocio, no solo por poder hacer su negocio,
y salir libre de aquel; sino tambien por los Mandarines, como Acusador, y
persona inteligente, y de Autoridad que era por ser oficial de otro Mandn.Mandarin
muy grande, le daban mano en esta causa; este como gentil que era, para me-
xor persuadir lo ageno que estaba en esta causa, diò en otra imbencion dia-
bolcia; y fue encartar (como hizò otras algunas vezes) a la Yglesia de Jung
cheū diciendo, que en ella se havia tratado esto dho el sobre dicho negocio. El Mandarin
que habia de menester poco por su mucho desafecto, y no poco vino, que ya tenia
entonzes en la barriga, sin considerar lo que hacia, pasò a la Yglesia de Jung
cheū, y arebatamente mando deshazer el retablo, y ymagines de Nro.Nuestro
Señor y N.Nuestra Señora, que estaban en el, y las hizò meter en su barco; no se
pudò apagar en esto el fuego, que fomentado del vino ardía en su pecho, y assi pasò
a otras diligencias arto perversas, y pernisiosas, que fueron hacer quemar publica-
mente un letrero, en que estaba una breve noticia de la Ley de Dios, contra la qual
actualmente blasfemaba, y trataba como secta falsa, y movido de zelo de sus
falzas sectas, mando à parezer delante de si algunos Christianos, a los quales persu-
adia, que apofastassen de la Ley de Dios, prometiendoles que de essa suerte les estaria
bien,, y no tendrian de que temer: y buelto a los Gentiles, a quienes mostraba querer dar
gusto, por no ser de la Ley de Dios, les dixò; que si no querian que aquella Yglesia
estubiesse alli, pusiesen una peticion sobre esso delante de el, y que el la haria luego
derribar. Con este enemigo tan declarado pocas esperanzas les podia quedar a los
Pes.Padres de algun buen fin, y muchos temores les podian asistir de los trabaxos, que ya
les hamenazaban; no solo por su mucho desaffecto, y poder que como Mandarn.Mandarin
tenia; sino tambien porque, como es comun en el mundo, havia de querrer hazer
buenos los disparates por el ya executados, y cohonestar, o sacrificar sus mala
operaciones, pasando a èxecutar otros mas altos disparates, y otras mas feas
operaciones. =
N. 17. Bolbiose dho Mandarin a la Ciudad de XàoKingfū, y al dia siguiente,
que era 17 de Septiembre de 1707. remitio por medio de sus Ministros a la Yglesia
el sobredho retablo con sus ymagines con orden de que lo entregassen todo al R. P. Vico.Reverendo Padre Vicario
Provl. Fr.Provincial Fray Thomas Hortiz, y tomassen del recivo, o sertificacion de la entrega: lle-
garon los Ministros de la Audiencia a la Yglesia con dho retablo, y luego man-
daron a avisar a dho R P. de que ellos estaban allí por orden del Mandn.Mandarin
saliò dho P. muy ageno de todo lo que afuera pasaba, y luego los Minist-
tros le dieron el recado, que train de parte del Mandn. y le mostraron los
despoxos de las [uñas] de aquel lobo. Quedo dho Pe. tan dolorido con esta

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primera instancia, uno fue el sobredhosobredicho Apostata; Pasaron a reconoser la causa, y
hallaron que no era negocio de que se podia temer; y para quitar, o consolar a
los vezinos de algunas Aldeas, que estaban algo atterorizadas, y con algun so-
bre salto con la noticia de este levantamineto, que assi le llamaban agunos, man-
daron hazer comedias (como acostumbran los Chinas en semexantes ocaziones)
con una aldea no lexos de la de Jungcheū, y para que la funzion tubiesse mexor ef-
fecto, baxò el mismo Mandarin de la Ciudad de Xaò Kingfu, estando alli
viendo la comedia, y bebiendo vino, llegò uno, que se discurre fue el Acudador
el qual andaba muy metido en este negocio, no solo por poder hacer su negocio,
y salir libre de aquel; sino tambien por los Mandarines, como Acusador, y
persona inteligente, y de Autoridad que era por ser oficial de otro Mandn.Mandarin
muy grande, le daban mano en esta causa; este como gentil que era, para me-
xor persuadir lo ageno que estaba en esta causa, diò en otra imbencion dia-
bolcia; y fue encartar (como hizò otras algunas vezes) a la Yglesia de Jung
cheū diciendo, que en ella se havia tratado esto dho el sobre dicho negocio. El Mandarin
que habia de menester poco por su mucho desafecto, y no poco vino, que ya tenia
entonzes en la barriga, sin considerar lo que hacia, pasò a la Yglesia de Jung
cheū, y arebatamente mando deshazer el retablo, y ymagines de Nro.Nuestro
Señor y N.Nuestra Señora, que estaban en el, y las hizò meter en su barco; no se
pudò apagar en esto el fuego, que fomentado del vino ardía en su pecho, y assi pasò
a otras diligencias arto perversas, y pernisiosas, que fueron hacer quemar publica-
mente un letrero, en que estaba una breve noticia de la Ley de Dios, contra la qual
actualmente blasfemaba, y trataba como secta falsa, y movido de zelo de sus
falzas sectas, mando à parezer delante de si algunos Christianos, a los quales persu-
adia, que apofastassen de la Ley de Dios, prometiendoles que de essa suerte les estaria
bien,, y no tendrian de que temer: y buelto a los Gentiles, a quienes mostraba querer dar
gusto, por no ser de la Ley de Dios, les dixò; que si no querian que aquella Yglesia
estubiesse alli, pusiesen una peticion sobre esso delante de el, y que el la haria luego
derribar. Con este enemigo tan declarado pocas esperanzas les podia quedar a los
Pes.Padres de algun buen fin, y muchos temores les podian asistir de los trabaxos, que ya
les hamenazaban; no solo por su mucho desaffecto, y poder que como Mandarn.Mandarin
tenia; sino tambien porque, como es comun en el mundo, havia de querrer hazer
buenos los disparates por el ya executados, y cohonestar, o sacrificar sus mala
operaciones, pasando a èxecutar otros mas altos disparates, y otras mas feas
operaciones. =